Los créditos financieros pueden cambiar totalmente el futuro y estado de tu negocio. Pueden tener enormes beneficios ya que te permiten desarrollarte o cumplir tus metas. Sin embargo también pueden tener graves consecuencias si son mal manejados. Estas pueden ser tan serias como la bancarrota de tu emprendimiento y/o perder tu patrimonio personal. La elección de qué crédito solicitar va a depender de las necesidades de tu empresa. Necesitas tener en mente que hay que pagar sueldos, impuestos, renta, materia prima… todos son igual de importantes. Por eso antes de tomar cualquier decisión sobre tu empresa para elegir un crédito, tienes que ordenar las prioridades y necesidades que pueda tener tu empresa a corto y largo plazo. Para que puedas decidir qué tipo de crédito te conviene más para tu negocio, hoy te vamos a presentar una pequeña guía sobre algunos de los muchos créditos existentes.
- Créditos de capital de trabajo
El capital de trabajo es la cantidad de recursos que una empresa necesita para operar en su día a día. Es muy común que las empresas no tengan todos los recursos que necesitan para esto. Este tipo de crédito te permite cumplir con tus necesidades operativas, permitiéndote crecer como empresa. O en el peor de los casos, te salva de un colapso. El monto del crédito solicitado, dependerá de lo que requiera tu empresa para funcionar. Normalmente el crédito otorgado lo define la institución financiera donde lo solicites: bancos, fintech, etc. Tenlo en cuenta por si decides buscar un crédito de este tipo.
- Créditos a largo plazo
Los créditos a largo plazo son, en su mayoría, utilizados para comprar algún equipamiento nuevo, invertir en un sector nuevo de la empresa, ampliar la plantilla de personal… Estos créditos tienen una duración superior al año, lo que permite ampliar el espectro de maneras de usar este dinero. Sin embargo, el banco requiere y solicita tu historial de comportamiento financiero, ya que tienes que probar que vas a poder pagar el monto en un futuro. Estos créditos pueden tener tasas de interés más bajas y los plazos pueden ser más largos. Obtener este tipo de créditos es muy complicado para nuevas empresas por el difícil proceso de aprobación. Se recomiendan más a negocios más experimentados que puedan cumplir con los criterios.
- Créditos a corto plazo
Estos préstamos tienen una duración menor a un año. Son ideales si necesitas acceso rápido a dinero para resolver alguna emergencia de tu empresa. Conseguirlos podría ser mucho más fácil, necesitando sólo los documentos requeridos por la institución financiera y una manera de probar que vas a poder pagar el monto acreditado. Las pequeñas empresas son las que más se benefician de los créditos a corto plazo ya que les permiten manejar las fluctuaciones de efectivo que las podrían gravemente afectar.
- Créditos revolventes
Los créditos revolventes son similares a una tarjeta de crédito. Su funcionamiento es bastante sencillo; se te otorga una línea de crédito, la utilizas, en el momento en el que liquides tu deuda la línea de crédito vuelve a estar a tu disposición. Además de pagar el monto prestado, tendrás que pagar los intereses y los otros cargos requeridos por el banco. Aunque este tipo de crédito sea mucho menor al resto es una manera de tener efectivo en cuanto sea necesario. Lo único es que uno tiene que tener cuidado con los créditos revolventes, ya que si son mal manejados los intereses se acumulan y acaban haciendo más mal que bien. Este tipo de créditos suele ajustarse a los negocios que manejan con mucha incertidumbre y que nunca saben cuando pueden necesitar efectivo de emergencia. Sin embargo tienen que poder pagar el monto acreditado.
- Crédito pyme
Los créditos pyme son créditos específicos para empresas chicas o medianas. Siendo un emprendimiento nuevo, te puedes beneficiar en acceso a capital en poco tiempo, financiamiento para estrategias de crecimiento, no sacrificar la liquidez de tu negocio, obtener tasas de interés fijas, crear historial crediticio. Estos beneficios dependen de la institución con la que solicites tu crédito empresarial. Pero independientemente el apoyo financiero que da este tipo de créditos es muy importante ya que toman en cuenta el tamaño de tu empresa. Si te hacen falta requerimientos para otros créditos esta es una gran opción.
Esperamos que con esta pequeña guía te hayas informado sobre las bases de algunas de las opciones de créditos que tienes a tu disposición. Y que te haya ayudado a entender que tipo de crédito necesitas. Tu decisión depende para qué necesidad de tu empresa lo quieres. Ya sea abastecer inventario, adquirir nueva maquinaria, abrir nuevos puntos de venta, digitalizar operaciones, entre otros, define qué quieres lograr. Identifica lo que buscas, lo que tienes y lo que te conviene, lo que te conviene, recuerda que es indispensable elegir una opción que no comprometa tu capacidad de pago, el crédito es una palanca de aceleración en el logro de tus metas, pero conlleva la responsabilidad de mantener, proteger y mejorar tu historial crediticio, para que en metas futuras, sigas siendo sujeto de crédito.
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Mariana Muñiz | Equipo Victoria147
